7.6.08

Un peu de mes écrites.

Me encontraba bajo el frágil refugio de mis ensoñaciones contemplando el descender del llanto celestial en medio del reinado de sombras, mudas testigos de crímenes inimaginables, cuando extasiado en la desolación reinante, acudieron sangrientos murmullos de seres perdidos en el vacío, regando así la inspiración que dormía en los campos de mi amargura, Así os ofrezco el podrido fruto de un desvarío:

Un sonido lejano
sentidos extraviados,
caminar sin destino
a mitad de la noche,
entre sombras muertas
me veo en tus temores,
pesadilla ajena invadiéndome,
un reflejo de angustia,
recuerdo el dolor
alfiler en un adiós,
destello del infierno
amor destructivo,
ígneo sentimiento
el ataúd esta ardiendo,
ríos de venas desapareciendo
vapor nauseabundo
imagen entre las llamas,
sigo corriendo en este bosque
voz nocturna clamando mi nombre
siento la llamada en mi mente
vinculo inmaterial
comunicación abismal
el caos en la inmortalidad,
sepulcro en vida
vagabundo errante,
siento tu grito cercano
recorriéndome en cada gota,
rubí tras rubí dentro de mi cuerpo,
ofrenda al altar de los muertos
antesala sin espacios
tiempo indeterminado
busco tu ultimo aliento
el elixir de tu cuerpo,
ven en medio de la noche
grita una suplica
ponte a orar en mi nombre
siento tu llamado
lejano murmullo apagado
silencio aterrador de mil años
esta noche anhelas la muerte
profanas mi tumba
esperas el amor de la frialdad
esta noche estarás en mis brazos
sentirás las garras del deseo
caricia falsa
exaltare tus sentidos
desatando tu lascivia,
admira tu nueva condena
sacrificada en la falsa salvación,
tu agonía es mi deleite
crucifixión sin remedio,
siente la corona de la derrota
ordenes sobre tu mente
debilidad fatal
voluntad quebrantada,
siente el beso de mis deseos
siente la caricia de mi lujuria
el dolor traspasándote
cuchilla sobre tu piel,
ingenuidad, causa de muerte
tu inocencia se pierde en la nada
el placer será otorgado
un momento con tu cuerpo
ladrón de vida
succionador de tus sueños
siente la pasión de los muertos
alcoba pétrea, hermosa cripta
paredes cubiertas de rojo
cobijo sobre osamentas,
no hay falsos salvadores
la fe inepta te ha cegado,
te entregas ahora
ilusa ante la decadencia
somnolienta, hipnotizada
¿Dónde esta tu dios ahora?
No importa la respuesta
caes sobre mi lecho feneciente
impotente ante mi espectro
sumisa ante mis deseos
un suspiro arrojado al vacío
¿ves la llama que arde en mis ojos?
Es el fuego de tus temores
soy el placer que te aterra,
admira la inmortalidad
efímera visión del paraíso,
abraza a tu frío asesino
siente el calor de tu sangre,
palpitante río regando mis venas,
ante mi deleite palidecerás
perdida entre quimeras
volando entre nubes de cristal
abre los ojos a tu condena
entre murmullos recitas mil desvaríos,
este es el precio por tu osadía,
estupefacta admiras tu derrota,
siente el éxtasis de tu lento fenecer,
en este hechizo me invocaste
no hay conjuro que me detenga
tu amor podrido me maldijo
¿ahora comprendes mi agonía?
Tus rezos son inservibles
esta noche dormirás bajo mi sepulcro
esta noche te entregaras a mis deseos
esta noche disfrutaras del descanso eterno.



Atte. L'ange déchu.